La situación actual revela que los costos asociados al cibercrimen a escala global han alcanzado niveles sin precedentes; se proyecta que, para este año, la cifra alcance la notable suma de aproximadamente US$9,5 mil millones. En respuesta a este desafío creciente, la industria de ciberseguridad ha mantenido su progresión, experimentando un constante aumento en las inversiones por parte de las empresas.
1. La ciberseguridad en el mundo
Exploremos, a través de dos tendencias a nivel mundial, los panoramas que delinean el mercado de la ciberseguridad en 2024.
A. Avances en Machine Learning e Inteligencia Artificial
La convergencia entre las tecnologías de aprendizaje automático (Machine Learning) e inteligencia artificial (IA) presenta una oportunidad significativa para la mejora continua de la ciberseguridad.
La implementación de sistemas de IA es esencial para la automatización efectiva de diversos procesos, especialmente aquellos relacionados con la detección de amenazas, la gestión de incidentes y el análisis predictivo.
Sin embargo, este desarrollo ha propiciado el surgimiento de amenazas cibernéticas potenciadas por la inteligencia artificial (IA). Estas amenazas muestran un nivel de astucia impresionante y una capacidad excepcional para ajustarse en tiempo real.
B. El surgimiento de estrategias ingeniosas para móviles, dispositivos vestibles y objetos conectados
En vista de este escenario, los expertos en seguridad anticipan que se continuarán desarrollando novedosas estrategias ingeniosas para dispositivos móviles y el Internet de las Cosas (IoT).
Estos avances seguramente se emplearán para intensificar actividades de ciberespionaje y ciberdelincuencia altamente sofisticada.
2. ¿Qué le depara a América Latina?
De acuerdo con los hallazgos revelados en la edición 2023 del informe Global Cybersecurity Leadership Insights, se revela que 62% de las compañías en América Latina han experimentado situaciones de filtración de datos. Además, 91% han enfrentado incidentes relacionados con la ciberseguridad.
A. Las PyMEs y la ciberseguridad
En tiempos pasados, los ataques cibernéticos solían dirigirse principalmente a grandes corporaciones; sin embargo, en la actualidad, su alcance se ha expandido para afectar también a pequeñas y medianas empresas. Este fenómeno en aumento se atribuye, en parte, a la falta de preparación y defensas, así como a la subestimación de riesgos al no considerarse entidades de envergadura.
B. El riesgo puede estar dentro de la empresa
Aunque las herramientas tecnológicas desempeñan un papel crucial, un factor que está adquiriendo cada vez más importancia es el riesgo asociado a amenazas internas. Estas amenazas pueden surgir cuando empleados de una organización colaboran con criminales, otorgándoles acceso a las redes de la empresa.
C. La región invierte poco
Aunque sería ideal que las empresas asignaran al menos el 10% de su presupuesto de Tecnologías de la Información (TI) a ciberseguridad, esta práctica es poco común en nuestra región.
De acuerdo con la investigación previamente citada, el gasto anual total en ciberseguridad por parte de empresas latinoamericanas actualmente oscila entre $10 y $49 millones de dólares. Es evidente que, aunque esta cifra representa un compromiso financiero significativo, es proporcionalmente pequeña en comparación con las enormes pérdidas potenciales que podrían derivarse de la falta de protección adecuada.
D. ¿Qué debes hacer?
A medida que los desembolsos en materia de ciberseguridad y los gastos asociados a ciberataques proyectan un aumento en los próximos años, la necesidad de una preparación a largo plazo se vuelve más apremiante que nunca.
La clave radica en adoptar una perspectiva proactiva que permita afrontar estos desafíos de manera eficiente. Al centrarse en una visión colaborativa, haciendo hincapié en la simplicidad y la integración holística en todos los niveles de la organización, las empresas pueden potenciar sus medidas de ciberseguridad.