En una época donde los cambios tecnológicos suceden con rapidez, es fácil que pasen desapercibidos los dispositivos pioneros que sentaron las bases para el futuro. Dentro de su largo legado de innovación, Xerox fue un actor importante en el desarrollo de las computadoras personales.
Para conocer este poco conocido capítulo en la historia tecnológica hay que retroceder al inicio de la década en los 70, cuando Xerox presentó al mundo su visión de la oficina del futuro, la Xerox Alto, desarrollada en su centro de investigación en California.
El antes y después de las computadoras
Xerox Alto introdujo dos elementos que cambiarían para siempre la manera en que se utilizaban las computadoras: una interfaz gráfica y el ratón. Hasta 1973, las pantallas de comandos y el uso de un tabulador eran el complejo sistema que utilizaban los usuarios para interactuar con las terminales de computación.
Las dos innovaciones de la Alto fueron un salto radical hacia una interacción más intuitiva y accesible.
Xerox Alto fue concebida en 1972 como parte de un proyecto interno, encabezado por el ingeniero Chuck Thacker, quien siempre tuvo en mente la posibilidad de un ordenador personal.
Mucho más que un ordenador
Hay otros elementos que hicieron única a la Xerox Alto. Su microprocesador de 16 bits, su memoria RAM con capacidad de 128 kilobytes y su disco duro que podía almacenar ¡2.5 megabytes!; en la actualidad los smartphones tienen hasta 12 gigabytes de RAM y su almacenamiento puede llegar a un tera (equivalente a mil gigabytes). Además, la Alto tenía conectividad a través de la red Ethernet (de la que Xerox también fue pionera).
Este innovador dispositivo nunca fue comercializado, su costo de producción era de unos 12,000 dólares y se estima que en el mercado podría haber alcanzado un costo de 40,000 dólares.
Las unidades que se fabricaron fueron donadas a otras universidades como el MIT, Stanford o Rochester, lo que sirvió para que su tecnología sirviera como semilla de innovación en otros centros de investigación.
Inspiración detrás de Microsoft y Apple
La influencia de la Xerox Alto no quedó solo en las universidades. En 1979, Steve Jobs, uno de los fundadores de Apple, visitó el centro de investigación y quedó sorprendido con las características de la Star, un dispositivo derivado de la Alto. Jobs adquirió los derechos de la interfaz y el ratón para incluirlos en el desarrollo de los primeros ordenadores de Apple.
De forma similar, Bill Gates estaba consciente de los desarrollos tecnológicos que ocurrían en el centro de investigación y contrató Para Microsoft a muchos de los ingenieros que trabajaron para Xerox. Así, las dos de las compañías más populares en tecnología computacional tienen en su ADN elementos de Xerox.
Xerox, legado de innovación que perdura
Hoy Xerox continúa a la vanguardia en el desarrollo de soluciones digitales para facilitar el trabajo en la oficina. De las fotocopiadoras y los escáneres hasta programas para la gestión documental e impresión o trabajo en la nube, Xerox mantiene su compromiso con la innovación y la transformación digital en el entorno laboral.
